El buen desempeño de las ciudades de entre 100.000 y un millón de habitantes es determinante para lograr que las economías latinoamericanas sean más productivas y competitivas.
Las ciudades intermedias están ganando cada vez más protagonismo en el desarrollo socioeconómico de América Latina. En ellas viven el 32% de los latinoamericanos; algunas estimaciones indican que pueden concentrar hasta el 17% del PIB; y juegan un papel determinante en el entramado logístico, de transporte de materias primas y de consumo de bienes y servicios.
En ocasiones a la sombra del progreso de las grandes urbes, estas ciudades de entre 100.000 y un millón de habitantes han pasado relativamente desapercibidas en los planes de desarrollo de los países de la región. Pero en los últimos años son muchos los estudios que arrojan conclusiones contundentes acerca de su trascendencia: por una parte, serán determinantes para aumentar la productividad y competitividad nacional y regional; y por otra, están llamadas a contribuir significativamente a cerrar las brechas entre zonas rurales y urbanas y, con ello, a brindar más prosperidad a los ciudadanos.
“Las ciudades intermedias latinoamericanas presentan cierto rezago en comparación a otras regiones más avanzadas. Para recortar las brechas, es imprescindible impulsar la equidad e interacción con el campo, planificar el crecimiento ordenado de los territorios, anticipar los efectos del cambio climático y la lograr una mayor participación ciudadana en las decisiones políticas y sociales”, explica Soraya Azan, experta en desarrollo urbano de CAF -banco de desarrollo de América Latina.
Precisamente, el organismo multilateral está apoyando iniciativas en al menos 30 ciudades intermedias de América Latina en áreas como desarrollo urbano, educación, transporte, ambiente y cambio climático. Los esfuerzos se concentran en potenciar las capacidades crecientes, planificar y desarrollar el territorio e implementar proyectos que impacten positivamente en la calidad de vida de sus habitantes.
Debido a las oportunidades que se vislumbran en estas ciudades, según Azan, es necesario impulsar el emprendimiento e innovación, el fortalecimiento de su gobernanza e institucionalidad, y el apoyo a las iniciativas y proyectos detonantes que propicien el desarrollo de intervenciones integrales.
Estos son algunos ejemplos de intervenciones de CAF en ciudades intermedias:
- Colombia: Montería, Valledupar, Pasto y Pereira. CAF ha financiado y asesorado en los últimos años el SETP de Montería. Para esta ciudad y Valledupar se desarrollaron dos planes maestros de movilidad activa y espacio público y dos planes de expansión urbana controlada. En las ciudades de Pasto y Pereira se realizaron actividades de urbanismo táctico y de asesoría a los gobiernos locales en materia de integración modal. Capitalizando este trabajo centrado en movilidad sostenible, se presentó una propuesta al Fondo Verde del Clima, obteniendo recursos para la preparación de proyectos.
Gracias a estos estudios, se espera continuar con la construcción de infraestructura, equipamientos sostenibles y la generación de capacidades en el periodo 2019-2022. Dentro de los beneficios esperados se incluye la reducción de 500.000 CO2eq Toneladas en los diez años siguientes a la implantación del proyecto y la transformación urbana y cultural en estas ciudades. La población beneficiada asciende a más de un millón de personas.
- Perú: Piura. El Plan Maestro de Movilidad Urbana Sostenible, desarrollado durante 2018 y aprobado por Ordenanza Municipal, identificó necesidades de inversión de unos USD 2.000 millones para más de una década, priorizando las más urgentes en seis proyectos integrales que, usando el transporte urbano como eje estructurante y planteando el diseño de infraestructura bajo los criterios de “calles completas”, proveerán a la ciudad de espacios y servicios más equitativos, inclusivos y sostenibles. El siguiente paso es la elaboración de estudios de pre-inversión de los proyectos priorizados: por un lado, CAF espera poder desarrollar la primera fase del futuro sistema integrado de transporte público durante 2019; por otro lado, la institución ha postulado otro de los proyectos, el de regeneración del centro histórico de la ciudad, al fondo TUMI del gobierno alemán que, de resultar ganadora la propuesta, permitirá elaborar los estudios de pre-inversión.
- Perú: Trujillo. En 2018 CAF contrató y supervisó el estudio de pre-inversión para un corredor de transporte masivo, que recorre el eje norte-sur, vertebrador del sistema de transporte de la ciudad. El proyecto, que culminará en los próximos meses, propone significativas mejoras de diseño vial y accesibilidad y una integración urbana “fachada a fachada” en el centro de la ciudad, con el objetivo de regenerar y potenciar el centro histórico de la ciudad, una de las más importantes ciudades coloniales de Perú. Asimismo, CAF ha propiciado una coordinación entre las entidades nacionales y provinciales que ha resultado en un convenio que permitirá contar con un préstamo de CAF para financiar la ejecución del corredor y las mejoras en el centro histórico a lo largo de 2020 e inversiones complementarias para asegurar la sostenibilidad de la movilidad en la ciudad.
- Panamá: David. La ciudad de David y Municipios conurbados, con más de 300 mil habitantes, constituyen la segunda urbe de Panamá. Con recursos de la Unión Europea en el transcurso del 2019 se estará formulando un Plan Integral de Movilidad Urbana Sostenible. Este plan va a generar una hoja de ruta (con objetivos, estrategias, líneas de acción, presupuestos y responsables en el corto, mediano y largo plazo) en el área de estudio, orientada a reducir distancias y tiempos de viaje, a racionalizar el uso de modos motorizados privados, a fomentar el uso de transporte público, bicicleta y la caminata, a optimizar el transporte de mercancías, a reducir emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero, y a disminuir el número de víctimas en incidentes de tránsito.
- Argentina: Rosario. El tráfico ya no es sólo un problema de grandes urbes o ciudades, es ahora también una realidad para ciudades intermedias. Este es el caso de Rosario, el núcleo del principal corredor industrial de Argentina. Con un poco más de 1 millón de habitantes y la tercera ciudad más grande de Argentina, Rosario ya está experimentado las pérdidas económicas de tiempo y recursos que trae consigo la congestión vehicular. Con el propósito de atender este desafío, Rosario se integró al grupo de ciudades que participan en el programa de Logística Urbana Sostenible (LOGUS) de CAF, el cual busca proporcionar un diagnóstico sobre los problemas de logística de la ciudad y así identificar herramientas de mejora para los esquemas del diseño de la logística y comprender su expansión mientras se reducen sus efectos negativos. En línea con este trabajo, durante el 2018, la Municipalidad presentó el Inventario de Gases de Efecto Invernadero que buscó contabilizar los gases emitidos en la ciudad durante un año. En éste se reporta que el sector de transporte aporta 24% de las emisiones en la ciudad. Por ello, y considerando que el transporte de carga aporta el 40% de las emisiones de CO2 derivadas del transporte urbano, Rosario es una de las tres ciudades de Argentina participando en el Proyecto EcoLogistics: Transporte de Carga Bajo en Carbono para Ciudades Sustentable patrocinado por ICLEI.
- Brasil: Jaraguá do Sul. CAF se encuentra desarrollando una operación integral en una ciudad del Estado de Santa Catarina llamada Jaraguá do Sul. Con una población de 170 mil habitantes de origen alemán en su mayoría y una economía basada en la industria, el municipio quiere profundizar su desarrollo y renovación urbana mediante el desarrollo en paralelo del centro de la ciudad y otras nuevas centralidades, promoviendo además una movilidad y accesibilidad sostenible. Las soluciones al desafío de la de la movilidad sostenible no siempre usan las mismas fórmulas porque no parten desde los mismos lugares, en algunos casos las características geográficas del territorio y su posicionamiento obligan a buscar alternativas para responder a las demandas de la población de forma eficiente y eficaz. De este tipo de ciudades intermedias podemos aprender mucho en el difícil camino de encontrar soluciones prácticas e innovadoras, identificando los factores que gatillan el éxito no siempre replicable en contextos similares.