El cáncer de pulmón es el más común en el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud, cerca de 1.8 millones de personas se detectan con esta enfermedad por año, a nivel global, y fallecen alrededor de 1.5 millones. Dado a su alto impacto, médicos y científicos han centrado su atención en cómo mejorar el futuro contra esta enfermedad, trayendo consigo a la inmunoterapia como una nueva opción de tratamiento.
La inmunoterapia es un tipo de terapia biológica desarrollada a partir de células vivas, que busca activar las defensas naturales del cuerpo en lucha contra el cáncer. “Nuestro sistema inmunológico utiliza sustancias, ya sea producidas por el cuerpo o en un laboratorio, para mejorar o restaurar su función. Por ende, la inmunoterapia estimula al sistema inmune del paciente a reconocer y destruir las células cancerígenas y a trabajar en impedir que estas se dispersen hacia otras partes del cuerpo”, destacó la doctora Marianne Chacón, gerente médico de Inmuno-Oncología de Roche Centroamérica y Caribe (CAC).
Actualmente, este tipo de tratamiento está aprobado por entidades regulatorias internacionales como la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), para uso en pacientes con cáncer de pulmón de células no pequeñas metastásico o localmente avanzado.
El cáncer de pulmón es el responsable de uno de cada cinco fallecimientos por cáncer en el mundo. Asimismo, tiene un alto impacto en regiones menos desarrolladas; por ejemplo, de acuerdo con la OMS se estima que alrededor de 471 panameños se diagnosticarán con dicha enfermedad en el año 2020, en el país.
Atención a los factores de riesgo
- Fumar: entre mayor sea la cantidad de cigarrillos fumados a diario y cuanto más joven se inicie con este hábito, mayor será el riesgo de desarrollar un cáncer de pulmón.
- Tener más de 60 años.
- Ser o haber sido fumador pasivo.
- Estar expuesto a radiación.
- Estar en contacto con productos de combustión de diésel, asbesto, gas radón o arsénico.
Fuente: Dra. Marianne Chacón, gerente médico de Inmuno-Oncología de Roche Centroamérica y Caribe (CAC).
Beneficios de la inmunoterapia
La inmunoterapia busca ofrecerles a los pacientes con cáncer de pulmón una innovadora opción para tratar su enfermedad y mejorar su calidad de vida. Uno de los factores diferenciadores de este tratamiento es que la tasa de respuesta es mucho más duradera versus quimioterapia; es decir, que la persona puede responder positivamente por más tiempo.
Otro de los beneficios es la practicidad con la que se aplica en la persona, ya que se puede administrar por vía intravenosa en un lapso de 30 minutos. Asimismo, sus efectos en el paciente son menores debido a su acción focalizada en las células cancerígenas (medicina personalizada), lo que hace que no sufra tanto de cansancio, malestar, caída de cabello o diarreas y pueda retomar su vida más fácilmente.
Los tratamientos actuales para el cáncer de pulmón contemplan radioterapia, quimioterapia, cirugía (en etapa temprana) terapias dirigidas y más recientemente, la inmunoterapia.
“Los primeros usos de la inmunoterapia se dieron a través de las vacunas, de forma preventiva; sin embargo, los avances de la ciencia han permitido que este tratamiento pueda aplicarse en personas con tipos especiales de cáncer como el de pulmón y vejiga”, comentó la doctora Chacón.
Innovación
Los investigadores continúan trabajando para ofrecerles a los pacientes las mejores terapias que permitan prolongar su vida a partir de la enfermedad. En el caso de Roche, la farmacéutica ya cuenta con la aprobación de la FDA y de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) para el uso de su inmunoterapia atezolizumab en el tratamiento de cáncer de pulmón de células no pequeñas en segunda línea y además, en cáncer de vejiga metastásico.
En Panamá, la inmunoterapia de Roche se encuentra en trámites de aprobación por parte de las autoridades de salud respectivas.
