Medtronic, líder mundial en tecnología, soluciones y servicios médicos, se une a la campaña global #UniteForParkinsons liderada por la Asociación Europea de la Enfermedad de Parkinson (EPDA) y apoyada por un sin número de instituciones a nivel mundial. A través de esta campaña la compañía brinda orientación, recursos y alternativas de terapias innovadoras que devuelven esperanza a las personas que viven con esta condición.
La enfermedad de Parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente en el mundo, afectando aproximadamente a 6.3 millones de personas. En Panamá, el número asciende a los 25,000 casos. La Organización Mundial de la Salud estima que el número total de pacientes se duplicará para el año 2030.
El objetivo de la campaña #UniteForParkinsons es educar a la población sobre lo que realmente es el Parkinson, que los pacientes se sientan empoderados y capaces y no vean el Parkinson como una limitante en sus vidas. El Parkinson es una enfermedad lentamente progresiva que afecta muchas de las funciones de la persona. Este trastorno neurodegenerativo afecta el sistema nervioso central y el movimiento. Se presenta de forma gradual a través de temblores casi imperceptibles. Además, frecuentemente causa rigidez o disminución del movimiento y alteración de la marcha.
Actualmente, no existe una cura para la enfermedad, sin embargo, existen terapias físicas efectivas, opciones farmacológicas y alternativas quirúrgicas que ayudan a controlar los síntomas durante un tiempo prolongado, lo que permite a los pacientes llevar una vida relativamente normal.
La Terapia de Estimulación Cerebral Profunda (DBS por sus siglas en inglés), ha demostrado ser efectiva en pacientes seleccionados adecuadamente por un neurólogo especialista en trastornos del movimiento.
Terapia de Estimulación Cerebral Profunda (DBS)
Para los pacientes con Parkinson que presentan un deterioro progresivo a pesar de haber respon-dido a tratamientos con medicación, existe una terapia muy eficaz denominada Estimulación Cerebral Profunda. La misma consiste en un dispositivo implantado en el cerebro a través de un procedimiento quirúrgico y es una de las más avanzadas para tratar la condición, ya que en los pacientes indicados ofrece períodos prolongados sin síntomas motores, reduce la cantidad de medicación y permite realizar tareas cotidianas, lo que se traduce en una mayor autoestima, independencia y calidad de vida.
Para Eliécer Guerra, paciente de 63 año, a quien le fue diagnosticada la enfermedad de Parkinson en el año 2017, la cirugía ha representado una mejora significativa en su calidad de vida. Tiene esposa, 5 hijos y dos nietos, y hoy en día está jubilado tras 40 años de labor en el Canal de Panamá como Ingeniero de Remolques.
“Al principio pensé que los síntomas se debían al estrés. Luego de ser evaluado por distintos especialistas se diagnosticó que tenía Parkinson. Los primeros síntomas fueron temblor en la mano y el pie derechos, sentía mucho cansancio y dolor en el cuello. En los últimos años se me hacía muy difícil realizar mi trabajo debido al temblor en mis manos. Después de la cirugía, no hay nada que no pueda hacer. La operación fue muy positiva para mí, ya que tras la jubilación paso temporadas trabajando solo en mi casa de campo en Chiriquí y voy a la ciudad a reunirme con mi esposa e hijos, salgo a la calle, me monto en el Metro y hago todas mis actividades con precaución, pero con normalidad”.
En Panamá, actualmente más de 19 pacientes se benefician de esta tecnología. Así lo destaca el Dr. Omar Gordon, médico neurocirujano: “la mejoría de los pacientes ha sido muy significativa en la gran mayoría de los casos, y en otros, los pacientes prácticamente han dejado de usar medicamentos para la enferme-dad, permitiéndoles tener una vida normal”.