Control de plagas: una prioridad para garantizar espacios empresariales saludables

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En Panamá, las oficinas y espacios empresariales no están exentos de enfrentar el desafío constante del control de plagas. Aunque se suele pensar que las plagas aumentan en la temporada lluviosa, los expertos señalan que las infestaciones se mantienen constantes durante todo el año; por lo tanto, la proliferación de insectos como cucarachas, hormigas, arañas y hasta roedores se convierte en una realidad ineludible para las empresas que buscan mantener un ambiente laboral seguro y saludable. 

En este contexto, cabe destacar que el Decreto Alcaldicio No. 004 de 2021 establece que todos los establecimientos comerciales en Panamá deben realizar fumigaciones periódicas, con una frecuencia que varía según el tipo de actividad económica. Para oficinas, se requiere una fumigación cada dos meses, mientras que sectores más sensibles, como la alimentación o la salud, deben cumplir con controles de plagas mensuales. 

Eliseo Moreno, vocero de Grupo EULEN Panamá, señala la importancia de la fumigación periódica en estos entornos. «Nuestro enfoque principal es la fumigación interna, donde tratamos plagas menores con productos especializados que no afectan a las personas ni al medio ambiente. El objetivo es garantizar un espacios limpios y libres de alimañas, cumpliendo con las normativas locales que exigen fumigaciones periódicas en oficinas y comercios», comenta Moreno. 

Entre las especies más problemáticas se encuentran las cucarachas alemanas, que prefieren áreas cálidas y húmedas como cocinas y baños. Las cucarachas americanas, por otro lado, pueden invadir tanto el exterior como el interior de los edificios tras lluvias intensas. Los roedores son otra plaga frecuente, especialmente en bodegas, zonas de almacenamiento y áreas alimentarias, donde la presencia de residuos y alimentos sin control los atrae. 

Contratar un servicio profesional de control de plagas permite a las empresas mantener sus instalaciones en condiciones óptimas, libres de bacterias que provienen de ratas, ratones o insectos, los cuales pueden dañar productos, equipos y mobiliario.  

Se recomienda seleccionar a empresas certificadas que apliquen productos avalados por las autoridades panameñas sin que haya afectación a los trabajadores y usuarios. 

«Cuando tratamos con roedores, utilizamos estaciones con cebos especiales que los deshidratan para evitar que fallezcan dentro de las instalaciones, lo que podría generar problemas de salubridad», agrega Moreno. 

La falta de prevención, limpieza adecuada y la actividad humana son factores que permiten la proliferación de insectos y roedores en cualquier momento. La mayoría de las empresas siguen cronogramas fijos de control de plagas, ajustándose únicamente ante incrementos inusuales en la presencia de plagas. 

Recomendaciones para prevenir las plagas en oficinas 

Para reducir el riesgo de infestaciones, es fundamental que las empresas adopten medidas preventivas de limpieza y manejo adecuado de residuos. A continuación, algunas recomendaciones clave: 

Mantener una limpieza diaria en áreas comunes como comedores, cocinas y baños, evitando restos de comida que atraen cucarachas, hormigas y roedores. 
Sellar grietas en paredes, pisos y puertas para evitar la entrada de plagas, como cucarachas, roedores y arañas. 
Gestionar adecuadamente los desechos, utilizando basureros con tapas herméticas y vaciándolos a menudo, especialmente en áreas en las que se manipulen alimentos. 
Controlar la humedad en baños y cocinas para evitar la proliferación de cucarachas y arañas, utilizando deshumidificadores si es necesario. 
Instalar trampas y dispositivos de monitoreo en áreas estratégicas para detectar infestaciones tempranas y facilitar un tratamiento rápido.